Reinventarse a los 52

 

A principios de este año me encontré en una situación que cada vez es más común pero no menos difícil: con 52 años y, de nuevo, en el paro.

Llegados a esta edad, el mercado laboral parece hacerte invisible, y si te dedicas a un sector cada vez más basado en IA, la búsqueda de trabajo se vuelve todavía más cuesta arriba. Uno se siente como cuando estas esperando el autobús y pasa de largo, dejándote con la mano en alto y sin saber que ha pasado.

Con esa sensación a cuestas, y tras meses de búsqueda sin éxito, empecé a pensar que otras opciones tenía. Por suerte, en medio de esa búsqueda apareció una oportunidad inesperada: el SEPE, en colaboración con Google, ofrecía un curso gratuito de ciberseguridad. Lo primero que pensé fue: "¿A mi edad, empezar con algo tan técnico?". Pero luego me dije: "¿Por qué no? Si el mundo sigue avanzando, quizás la mejor opción sea avanzar con él".

Y aquí estoy, sumergido en el mundo de la ciberseguridad, con conceptos que hace unos años ni imaginaba. Desde “phishing” y “malware” hasta “marcos y reglas”, cada término es un reto, pero siento que cada paso me acerca a una posible salida laboral. Además, esto de aprender a proteger la información digital es útil, no solo en el trabajo, sino en el día a día de cualquiera que usa Internet.

Este curso no solo me está dando una nueva opción laboral; también está haciendo ver que uno puede reinventarse a cualquier edad. Ya no se trata solo de adaptarse para conseguir un trabajo, sino de adquirir habilidades que en este mundo digital de hoy pueden marcar una gran diferencia. Porque, al final, no importa la edad que tengamos, todos necesitamos seguridad en la red.

Así que, si estás en una situación parecida, ya sea en el paro o buscando reinventarte, te animo a explorar opciones. Las puertas pueden parecer cerradas, pero siempre habrá una que esté entreabierta. A mis 52 años, voy descubriendo que nunca es tarde para aprender algo nuevo. Y, mientras tanto, compartiré por aquí mis avances y aprendizajes para que otros también se sientan un poco más seguros.

¡Nos leemos pronto en este nuevo camino!