Este fin de semana, en nuestra parcela han aparecido estas criaturicas, son las crías de la "Peque" una de las gatas que nació el año pasado y que este verano nos ha traído esto. A los que hay que sumar los tres o cuatro más que ya nos trajo el mes pasado una de sus hermanas.
La cosa es que al llegar cangreyayo se puso a regar, y se ve que les cayó agua y empezaron a chillar, por eso los vimos. Los sacamos de su guarida, debajo de unos geranios y cangreyayo los secó. Lo mejor es que la madre estaba allí mirándonos y no protestó en ningún momento, de hecho, nos dejo tocarlos y cogerlos, cosa que no hemos podido hacer con los de la otra gata. Después de acomodarlos un poco los volvimos a dejar en su sitio.
Cada uno nos pusimos a lo nuestro, yo estuve partiendo almendras hasta que me arrebató el sitio cangrejito.
Pero por la tarde, después de comer, la siesta y la merienda, mamacangreja escuchó unos chilliditos, como los de los gatitos que encontramos por la mañana, pero en otra parte del huerto. Los fuimos buscando hasta que los encontramos. Por lo visto la "Peque" no había tenido tiempo de llevarlos a todos y tenía otros dos esperando en otro escondite.
Decidimos facilitarle el trabajo, ya que está bastante flaca, y se los llevamos con los demás, a su gatera de los geranios. Esperemos que salgan los cinco adelante, pero por otro lado, la parcela se está convirtiendo en un santuario felino, digno de las mejores casas de viudas asociales que se rodean de decenas de gatos, nosotros de momento tenemos cerca de 15 gatos en estos momentos, y a menos no creo que vaya.
Lo mejor de todo es la experiencia para cangrejito que pudo tocarlos y cogerlos tan pequeñitos, creo que son vivencias que aportan mucho a los niños.
Por cierto, si alguien quiere algún gatico que lo diga que tenemos de todos los colores, blancos, negros, marrones, atigrados...
Jaja, a este paso , humanos no van quedar por allí. El blanco tenia cara de pocos amigos.
ResponderEliminarhttp://serendipeandoagusto.blogspot.com.es
Yo ya tengo dos tigres en casa y me temo que no podemos acoger más.
ResponderEliminarTe entiendo porque lo he vivido. En la casa de campo de mis abuelos cada verano encontrábamos una gran familia gatuna que en invierno el jardinero alimentaba. Como eran libres de ir donde quisieran salían y entraban a placer hasta que llegaba un día que no volvían. Pero todos los veranos había gatos y gatitos. Incluso fuimos testigos del parto de una gata que decidió parir en el sofá a la vista de todos. Cuando terminó el asunto el sofá estaba impoluto. Nos pareció increíble. Aún así mi abuela lo lavó a conciencia jajaja
Que gaticos más remonos!!!!
ResponderEliminarQuién tuviera sitio! yo sí me convertía en la loca de los gatos a la de ya! pero de momento no puede ser.
Que gaticos más monetes... :D
Estan bien guapillos, gracias por esa labor, lo dice un amante de los gatos.
ResponderEliminarSaludos, nos leemos.
Vamos, que ya sois unos expertos en gatos, eh? jajajaja
ResponderEliminarQué rebonicos son!!
Hola, que monada de gatitos . Yo ya tengo uno viejete el pobre y que no para de esconderse de las perrerias que le hace mi peke. Asi en mi casa ya tengo el cupo de felinos cumplido. Me gusta mucho el estilo de tu blog asi que me quedo por aqui y te sigo en face. Aprovecho para invitarte a mi grupo del face Frikymama's Blogger club https://www.facebook.com/groups/frikymamabloggerclub/?fref=ts. todos los blogueros con un toque friky son bienvenidos. un saludo
ResponderEliminarbuaff nosotros llegamos a tener treinta en la parcela!!! treinta chacho!! dejabas la cacerola de arroz con patas de pollo y aquello parecian hormigas!!!
ResponderEliminarHablamos con una protectora y a todas las hembras que pudimos coger las esterilizaron. La mayoría de los machos se fueron y no volvieron, pero las hembras que no pudimos esterilizar al año siguiente nos volvian a traer las crias.
al final lo pudimos controlar, pero como soy así, cada vez que me encontraba una cjita de gatitos en algún contenedor me la traía a casa. Con varios anuncios pude encontrar familia a la gran mayoría. Fue un descanso. Luego nos quedamos con unos diez, que nos trian conejos de la sierra!!! y vuelta a empezar haciendo uan enfermería de conejitos!! vivir en el campo era un no parar!!