La leyenda del dragón dormido

Independientemente del tema de hablar o no, sabéis que siempre os he dicho que Cangrejito es muy parado, que cuando otros nenes se ponían delante, agachaba la cabeza y se iba o venía a quejarse a los papis. Por eso pensábamos que era temeroso y que cualquiera niño se le imponía. Pero desde este viernes hemos cambiado el enfoque, ¿era miedo o auto control?.
El viernes por la tarde, volvía abuelacangreja de sus vacaciones en tierras cordobesas, así que fuimos a recogerla a la estación y después a pasar un ratito con ella. Nos invitó a un refrigerio en una cafetería que hay cerca de su casa con un parque infantil de esos con bolas y toboganes, etc. Al llegar nos encontramos que estaban celebrando un cumpleaños y aquello estaba petado de niños de diferentes edades, algunos más pequeños que Cangrejito y otros algo más mayores. La primera sorpresa es que nada más entrar se metió directamente al mogollón y cuando nos dimos cuenta estaba en la parte de arriba de la atracción jugando con otro nene.
Conociendo como lo conozco de vez en cuando me asomaba para ver que estaba haciendo. En una de las ocasiones, una niña de su edad o un poco más mayor le acaba de dar un empujón a Cangrejito, pero el se estaba riendo. Al poco, el y el otro nene se intentaban tirar por el tubo pero la nena salía y les empujaba, y ellos se escondían, pero a la tercera la nena empezó a pegarle y con cada golpe que esta le daba, ella recibía otro por parte de Cangrejito. Al final fui antes de que se hicieran daño.
Al rato me asomo y había cuatro o cinco niños, de unos cinco o seis años, que se metían en el tubo bloqueando el paso. Una de las veces que salieron cangrejito increpó a uno "déjanos tirarnos" y este le respondió con un escupitajo, y cangrejito le devolvió un guantazo en el brazo. Después un intercambio de golpes hasta que intervine de nuevo.
Esta vez me dirigí al niño porque era más mayor y le recriminé que pegara a los pequeños. 
Niño: "me ha pegado" -haciendo pucheros.
Yo: A mi no me llores que no soy tu padre, además os estoy viendo pegar a los pequeños, si vuelves a pegarles se lo digo a tu padre, ¿se lo digo?
Niño: No, no
Después siguieron jugando cada uno a lo suyo.
No había visto hasta el viernes a Cangrejito pegarle a otro niño, y mucho menos mayor que el, pero tengo que reconocer que me sentí muy orgulloso al ver como pegaba a los matones esos para defenderse a el y al otro nene.
Antes de irnos le dije que no estaba enfadado por haber pegado a esos nenes, que no queríamos que pegara a nadie, pero que si le pegaran que se defendiera.
¿Habremos despertado al dragón?